El Consejo de Gobierno ha autorizado a la Consejería de Economía, Conocimiento, Empresas y Universidad a prorrogar hasta el ejercicio 2024 el convenio firmado con el Fondo Español de Garantía Agraria (FEGA), dependiente del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, mediante el cual la Junta de Andalucía se encarga de la gestión de determinadas funciones del Fondo Europeo Marítimo y de la Pesca (FEMP) en el marco comunitario 2014-2020, periodo en el que Andalucía tiene asignado un montante superior a los 180 millones de euros.
El vigente convenio, que fue rubricado en septiembre de 2017 y culminará el 31 de diciembre de 2020, reconoce a la Consejería de Economía como organismo intermedio de certificación. Esta figura, recogida en la normativa europea encargada de regular la gestión de la financiación comunitaria, permite a los Estados miembros descentralizar determinadas actuaciones a favor de los gobiernos autonómicos con el fin de lograr mayor eficacia y operatividad.
Con carácter general, esa designación facilita el cumplimiento de las obligaciones impuestas por la reglamentación comunitaria, garantiza la supervisión de los recursos empleados y agiliza el abono de los fondos por parte de la Unión Europea. Como organismo intermedio, la Junta se encarga de realizar todo el procedimiento de certificación de los recursos del FEMP, que consiste en verificar, controlar y certificar el gasto, principalmente ayudas, convenios y contratos.
En concreto, se comprueba que los productos y servicios cofinanciados por Bruselas se han entregado y prestado y que el importe declarado por los beneficiarios, en el caso de las ayudas; o por los organismos adscritos a la Junta de Andalucía, en lo que respecta a la ejecución directa, ha sido pagado y cumple la legislación europea. Esta función ya la venía ejerciendo el Gobierno andaluz desde el anterior marco 2007-2013, en el que estaba operativo el Fondo Europeo de Pesca (FEP).
La prórroga autorizada por el Consejo de Gobierno permitirá dar continuidad a esas funciones encomendadas por el FEGA a Andalucía por un periodo de cuatro años más, hasta 2024, con el objetivo de cubrir todo el periodo de aplicación del programa operativo.
Aunque el fin de su vigencia está marcado para 2020, realmente su gestión se prolonga tres años más al acogerse a la denominada regla de gasto n+3. En virtud de esa regla, la justificación de estos Fondos Europeos puede prolongarse hasta tres años después de haber finalizado el marco 2014-2020, por lo que se dispondrá hasta final de 2023 para certificar el conjunto de los recursos que restan por gestionar. En 2024, año de finalización de la prórroga, se producirá el cierre del ejercicio contable correspondiente a 2023. PESCA Y ACUICULTURA
Andalucía tiene asignado para el horizonte 2014-2020 un montante de 8.015 millones de euros mediante cuatro programas operativos regionales y de carácter plurirregional: el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER), el Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (Feader), el Fondo Social Europeo (FSE) y el citado Fondo Europeo Marítimo y de la Pesca.
El FEMP incluye diferentes líneas de ayudas, entre ellas las dirigidas a apoyar el desarrollo sostenible de la pesca y la acuicultura; a fomentar la transformación y comercialización de sus productos; a compensar las paralizaciones temporales de la actividad de la flota con puerto base en Andalucía que faena en el caladero nacional; y a la selección de los Grupos de Acción Locales del Sector Pesquero.
El sector pesquero andaluz tiene una producción anual cercana a las 70.500 toneladas y un valor que supera los 300 millones de euros. Un total de 1.486 embarcaciones se dedican al ejercicio de la pesca profesional. De ellas, 29 son buques congeladores que faenan en caladeros internacionales y de terceros países y las 1.457 restantes, generalmente de tipo artesanal, lo hacen en las cercanías de la costa andaluza o en los de países vecinos como Portugal y Marruecos.
Dentro de este sector, una actividad en alza es la acuicultura, con instalaciones de alto nivel tecnológico, una producción que se acerca a las 10.000 toneladas anuales y una diversificación productiva creciente. Las principales especies producidas son la lubina, la dorada, el lenguado y el atún, a las que se suman los moluscos, como el mejillón. La acuicultura se desarrolla principalmente en las marismas, esteros y zonas intermareales de Huelva, Cádiz y Sevilla, mientras que en la costa mediterránea y sus acantilados, se producen en jaulas y ‘long- lines’ fondeados en mar abierto.
Vinculado a la pesca, un sector en creciente proceso de desarrollo y modernización es el de la transformación de pescados y mariscos en sus distintas elaboraciones, principalmente conservas, ahumados y congelados. Esta industria, que procesa cerca de 44.000 toneladas anuales y genera una facturación superior a los 310 millones de euros, se localiza sobre todo en poblaciones de larga tradición pesquera como Ayamonte, Isla Cristina, Barbate, Tarifa o Málaga.
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