Emotivo Homenaje a los marineros fallecidos en el “Begoñita y Pinito” hace 40 años

A medio día del domingo día 14, tuvo lugar un emotivo y entrañable homenaje a los 6 marineros fallecidos en el naufragio del  pesquero “Begoñita y Pinito”, coincidiendo con efemérides el mismo día que sucedió la tragedia, en el que se colocaba una lápida de mármol negro con los nombres de los marineros tallados en blanco, Manuel Ceada Almeida, Luciano Vázquez González, José Antonio Reyes Tortosa, Antonio Rodríguez González, Isidoro Bueno González y Manuel Alonso Lorenzo.

El acto tuvo lugar en el Monumento al Marinero, enclave dedicado a todos los hombres de la mar,  donde se descubrió la lápida conmemorativa, iniciativa que ha partido de familiares directos de las víctimas, y concretamente de Juan Manuel Martínez Ceada, nieto del patrón del pesquero, quien ha realizado trámites y gestiones oportunas para que este homenaje pudiera realizarse,  aunque ha tenido apoyo institucional, pues se encontraban en el homenaje la alcaldesa, María Luisa Faneca, quien ayudó también al descubrimiento de la placa, y entre el público, Francisco Zamudio, además de otros concejales de la Corporación Municipal y sobre todo muchos familiares de los marineros.

Como decíamos, esta iniciativa ha surgido de particulares que han querido homenajear “no sólo a estos marineros del Begoñita y Pinito, sino  en cierto modo, a todos los que han fallecido en la mar”, como así afirmó José Antonio Reyes Tobarra, hijo de uno de los fallecidos, en el manifiesto que leyó antes de la bendición de la placa por parte del párroco Carlos Javier Rodríguez.

Reyes, recordó otras tragedias marítimas que ha padecido Isla Cristina, “aquel mismo año de 1974 perdieron la vida otros tres marineros isleños en diferentes embarcaciones y circunstancias”, así como la sucedida también el 18 de diciembre de hace 25 años, el hundimiento del “Panchita Reina del Mar”, y hace 75 años también en este mismo mes, naufragaba el vapor sardinero “Purita Pérez”, donde fallecieron 46 marineros.

Desde principios de siglo XX más de 200 personas han perdido la vida, recordaba José Antonio, quien daba las gracias a Vicente López Márquez, presente entre el público, por realizar diferentes investigaciones durante largo tiempo y que han ayudado a esclarecer los hechos y tenerse más conciencia de lo que ocurrió.

Fue  en la tarde del 14 de diciembre de 1974, día en que aparecieron algunas tablas y despojos de un barco flotando, y un aro salvavidas con la inscripción “Begoñita y Pinto” mantenía  a flote sobre las aguas del océano el cuerpo sin vida de un hombre. Fue hallado por otro pesquero a sesenta millas de la costa de Huelva.

Cuando se identificó al desafortunado tripulante se pudo saber que se trataba de Isidoro Bueno González, el cocinero. La búsqueda de supervivientes por parte de otras embarcaciones de la flota pesquera no tuvo resultados. Cuatro o cinco días más tarde apareció el cuerpo de Manuel Ceada Almeida, patrón de pesca del barco que se había perdido. Del resto de la tripulación, cuatro hombres más, nunca se supo.

Tras el descubrimiento de la lápida, cubierta con la bandera de Isla Cristina, María Luisa Faneca dedicó unas palabras a todos los marineros que han fallecido en tragedias marítimas, felicitando también a los promotores de esta iniciativa. Faneca destacó con resignación que esta es la respuesta a veces de los hombres que trabajan en la mar, “pues la mar nos da y la mar nos quita”. Del mismo modo, y tras la bendición, Carlos Javier Rodríguez, deseó “que no se coloquen más placas de este tipo, y si es así, que sea para recordar a los que ya fallecieron en naufragios pero, pedimos a la Virgen del Carmen que no vuelvan a sucederse más tragedias de este tipo”.

Posteriormente, dos personas colocaron flores en la lápida que ya quedará para la historia de nuestro pueblo.

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